Algo de historia
Hasta hace muy poco tiempo, la capacidad del ser humano para
alterar el medio ambiente era limitada y puntual.
Pero en los últimos cien años la capacidad para alterar el
entorno se incrementado notablemente, llegando a poner en peligro la totalidad
del planeta.
La relación del ser humano con la naturaleza ha cambiado a
lo largo de nuestra historia.
·
Paleolítico
(Entre 2.5 m.a. – 10.000 a.)
La forma de vida del ser humano era la de ser recolector y
cazador, con una vida muy breve.
Para su subsistencia se desplazaba en busca del alimento de
unos lugares a otros.
Utilizaba su energía muscular, el fuego y los útiles de
piedra para sobrevivir.
El daño al entorno que se producía era mínimo.
·
Neolítico
(hace 10.000 a.)
El ser humano descubre la agricultura y la ganadería para su
alimentación y beneficio. Es la revolución agrícola.
Se vuelve sedentario, viviendo permanentemente en un lugar,
cueva o choza.
Utiliza la energía del ganado y canaliza el agua para el
riego de los cultivos.
El daño al entorno es bajo aunque ya se produce una pérdida
de suelo natural para su uso en la agricultura y la ganadería.
·
Edad
Media (siglos V a XV)
Se produce un incremento del comercio de los productos
agrícolas y ganaderos entre lugares muy alejado del planeta.
Crecen las ciudades y la población, pero se dan periodos de
hambre, de epidemias y de guerras.
Además de la madera,
se utiliza la fuerza del agua y de viento como recurso energético.
El daño al entorno crece con la deforestación, la minería,
la selección de especies y el sobrepastoreo.
·
Edad
Moderna (siglos XVI a XVIII)
Aparece la industrialización y la mecanización del trabajo y
también las desigualdades sociales y las migraciones humanas. Es la revolución
industrial.
La salud del ser humano mejora por la aparición de las
medicinas y la higiene, viviendo más tiempo.
Aumenta enormemente el uso del carbón y el petróleo para las
máquinas de vapor.
El daño al entorno es ya muy importante, con la
contaminación atmosférica y la sobreexplotación de materias primas.
·
Edad
Contemporánea (siglos XIX a XXI)
El uso de la electricidad y del motor de explosión determina
el gran desarrollo tecnológico actual, con grandes diferencias en el bienestar
social de los países.
Se produce un aumento exponencial de la población humana,
viviendo preferentemente en grandes ciudades, con un gran consumo de alimentos
y energía. Es el periodo de la revolución demográfica.
Los daños al entorno son críticos: el agotamiento de
recursos, una contaminación generalizada y las pérdidas de biodiversidad, de
bosques y de suelo fértil.
La protección del medio natural
Los científicos,
preocupados por la creciente contaminación derivada del desarrollo industrial y
crecimiento poblacional, sólo eran comprendidos por grupos sensible. Para entonces,
el tema general era de un optimismo desmesurado en favor del “desarrollo”,
entendido como un constante crecimiento económico de todas las naciones.
Sin embargo, las
primeras catástrofes ecológicas pronto acapararon la atención mundial, en
virtud de que se repetían y provocaban sensación de impotencia. La historia de
la “enfermedad de Minamata”,
considerada una epidemia entre los pescadores de la aldea de Minamata (Japón,
1953), fue un ejemplo esclarecedor. El equipo médico del hospital de Kunamoto
diagnosticó la causa de la enfermedad: envenenamiento del sistema nervioso
central causado por mercurio orgánico, comprobándose la presencia de dicho
metal en las cloacas de una planta química instalada cerca del pueblo. Doce
años tardó la empresa en tomar medidas concretas y otros tres para reconocer la
utilización de metilmercurio.
Otro caso resonante fue
la contaminación del Rhin (rio europeo)
por endosulfán insecticida (1969), que envenenó millones de peces y
dificultó el suministro de agua potable en muchas ciudades ribereñas.
El progresivo desencanto
de la población de países industrializados hizo que la voz de los científicos
que predicaban respeto a los principios ecológicos fuera cada día más escuchada
en temas como la superpoblación, el agotamiento de los recursos naturales, la
contaminación, la destrucción de los ecosistemas vírgenes y la opción nuclear.
En respuesta a la
preocupación poblacional, durante la década de 1960, se crearon organizaciones
en favor del medio ambiente, dando origen al “ecologismo”, entendido como una
actitud militante en favor del entorno, continuamente agredido por la
civilización industrial.
Esta corriente tiene por
objetivo sensibilizar a la opinión pública acerca de las leyes de la ecología
que condicionan la propia supervivencia de la humanidad. Las campañas
antinucleares llevadas a cabo por ecologistas abrieron el debate para
replantear el modelo de civilización al que se aspira.
Conferencias internacionales
El primer gran debate
ecológico a nivel internacional fue la Conferencia
Internacional sobre la
Utilización Racional y la Conservación de los Recursos de la Biosfera,
celebrada en París en
1968, organizada por la UNESCO. Dicha conferencia popularizó la
imagen de la Tierra concebida como una nave espacial de 3.500 millones de pasajeros
con recursos limitados que deben ser racionalmente utilizados si queremos
asegurar la supervivencia de la humanidad.
Conferencia de Estocolmo 1972 Es la primera gran
reunión de naciones donde se propone un cambio en la actitud del ser humano con
la naturaleza, naciendo la necesidad de la educación ambiental.
Luego 20 años de la Conferencia de Estocolmo, se
organizó la Conferencia de Naciones Unidas sobre Medio Ambiente y Desarrollo
(CNUMAD) en Río de Janeiro (Brasil,
1992), conocida como “Cumbre de la
Tierra” (ECO 92). Se tomaron decisiones: sobre el cambio climático, la conservación
de la biodiversidad, el uso sostenible de los bosques y diversas estrategias
globales sobre el desarrollo sostenible.
En 1997 se desarrolló la
Cumbre de Kioto: Reunión en la que
se llegó a un acuerdo vinculante sobre la reducción de las emisiones de los
gases responsables del efecto invernadero hasta el año 2012, así como diversos mecanismos
para su cumplimiento por parte de los países firmantes del acuerdo.
En Johannesburgo
(Sudáfrica, 2002), diez años después de la Cumbre de la Tierra de rio, se
establecieron vínculos entre el desarrollo socioeconómico y la protección del
ambiente, con énfasis en el desarrollo humano. Las discusiones no fueron sólo
entre funcionarios gubernamentales, sino entre representantes de la sociedad civil, y fue vista como la Primera Cumbre
Multisectorial. Las discusiones previas identificaron los siguientes ejes:
Globalización, Reducción de la pobreza y Cambio de los patrones de consumo.
En 2007 se desarrolló la
Conferencia
de Bali: Se llegaron a acuerdos sobre compromisos después de la finalización
del protocolo de Kyoto, sobre la reducción de emisiones de CO2 y el cambio
climático.
Acuerdo de Paris 2015: Los 195 países han llegado
a un acuerdo contra el calentamiento global, el primer pacto “universal de la
historia de las negociaciones climáticas”, según el presidente francés,
Hollande. El pacto fija techo a las emisiones de gases de efecto invernadero y pone
un límite de dos grados para el calentamiento global.
Organizaciones no gubernamentales
Desarrollan una
importante labor llamando la atención sobre los problemas medioambientales y
proponiendo actividades de actuación.
Greenpeace: Es una organización ecologista y pacifista internacional.
Su objetivo es proteger
y defender el medio ambiente y la paz, interviniendo en diferentes puntos donde
se cometen atentados contra la Naturaleza. Lleva a cabo campañas para: detener
el cambio climático, proteger la biodiversidad, acabar con el uso de la energía
nuclear, de las armas y fomentar la paz.
WWF Adena: Española, una de las mayores y más eficaces organizaciones
internacionales independientes dedicadas a la conservación de la naturaleza.
Su compromiso con el
mundo es que trabajando todos juntos se pueden encontrar las mejores soluciones
para salvar la naturaleza.
Tiene actuaciones en: La
conservación de la diversidad biológica mundial. El uso de recursos naturales
renovables y sostenibles. La reducción de la contaminación y el consumo
desmedido.
Ecologistas en acción: Es una confederación de más de 300 grupos
ecologistas. Es un ecologismo social, que entiende que los problemas
medioambientales tienen su origen en un modelo de producción y consumo
globalizado. Realiza:
Campañas de
sensibilización. Denuncias públicas o legales contra aquellas actuaciones que
dañan el medio ambiente. Elabora alternativas concretas y viables en cada uno
de los ámbitos en los que desarrolla su actividad.